En un mensaje sin pelos en la lengua, Sandrez señaló que quienes lo critican en realidad envidian su valentía y desearían tener la misma oportunidad de generar ingresos con su contenido. Además, destacó que la verdadera preocupación debería estar en problemas más serios que la venta de vídeos, como la fidelidad en sus relaciones.

"A mí no me engañan. Esos y esas que me critican también quisieran ganarse sus pesitos enseñando el cu.., lo qué pasa es que si lo hacen nadie les compraría, porque hasta para pelarse hay que tener gracia. Posdata: en vez de atacarse por mi contenido deberían de preocuparse por que sus parejas no los tengan de venados y venadas, creo que eso les afecta más a que yo venda mis vídeos", escribió.

El anuncio del influencer no solo incluyó palabras, sino también imágenes que elevaron la temperatura en las redes. Sandrez compartió fotografías sensuales, desafiando las políticas de censura de plataformas como Instagram y adelantando el material que ofrecerá en su cuenta exclusiva de contenido explícito.

Acompañado de su amiga y colega Jennifer Funes, Sandrez se une a la lista de hondureños que optan por esta vía para expandir sus ingresos. Con un precio establecido y una propuesta visual impactante, el influencer busca posicionarse en un mercado que, si bien polémico, parece ofrecer oportunidades económicas interesantes.

Antonio José Sandrez no es ajeno a la controversia. Con una carrera marcada por su audacia y su estilo único en el mundo de la moda, el influencer ha sabido ganarse un lugar en los medios y en las redes sociales.

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