Publicado 31 Ene. 2025
Por: Redacción TVC
Conoce los 11 países que no permitían el dólar y descubre por qué decidieron reducir su dependencia de la moneda estadounidense en el comercio global.
Publicado 31 Ene. 2025
Por: Redacción TVC
El uso del dólar en el comercio internacional se encuentra en un momento crítico, ya que 11 países han decidido prescindir de él en sus transacciones.
Estas naciones, pertenecientes a la Comunidad de Estados Independientes (CEI), buscan impulsar sus propias monedas, reducir la influencia estadounidense y fortalecer su competitividad financiera.
Este proceso, denominado "desdolarización", ha ganado impulso desde las sanciones impuestas por EE.UU. a Rusia en 2022.
La medida no solo refuerza la independencia económica de estos países, sino que también podría modificar el equilibrio del sistema financiero global en el corto y mediano plazo.
Actualmente, el 85% de las operaciones internacionales dentro del CEI ya se realizan en monedas locales.
Los líderes de la región sostienen que esta transición mejora la estabilidad financiera de sus economías y abre nuevas oportunidades fiscales para sus mercados.
Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Kazajistán, Kirguistán, Moldavia, Rusia, Tayikistán, Turkmenistán, Uzbekistán y Ucrania conforman la Comunidad de Estados Independientes (CEI).
A pesar de los conflictos entre Rusia y Ucrania, la mayoría de estos países han mantenido lazos comerciales sólidos y ahora avanzan en una estrategia financiera común.
Prescindir del dólar no es solo una decisión política, sino también un movimiento económico con objetivos claros.
Reducir la dependencia de la moneda estadounidense permite a estas naciones fortalecer sus economías, evitar fluctuaciones cambiarias y protegerse de posibles sanciones.
Además, la transición a monedas locales les brinda mayor control sobre sus políticas monetarias. Con esta medida, buscan :
Según el presidente ruso, Vladimir Putin, el uso de monedas nacionales en la CEI ha crecido y ya representa más del 85% de las transacciones comerciales.
Esta decisión podría debilitar la influencia del dólar en la economía global y modificar el equilibrio financiero.
Menos dependencia del dólar significa mayor estabilidad para los países de la CEI y la creación de mercados alternativos basados en monedas locales. Sin embargo, también podría reducir la demanda del dólar, afectando su valor y su papel como moneda de reserva mundial.
Si más economías adoptan esta tendencia, el dólar perdería protagonismo en el comercio global. Esto marcaría un punto de inflexión donde las monedas locales ganarían mayor relevancia en el sistema financiero internacional.