Al fallecer el cantante español, Camilo Sesto, dejó su fortuna a su único hijo, Camilo Blanes Ornela, pero a pesar de haber asegurado un lucrativo patrimonio el resto de su vida, este joven lleva un camino de adicciones y amarguras que lo van consumiendo.

Ornela de 36 años mejor conocido como, Camilín, ha sido centro de noticias en otras ocasiones, pero una reciente aparición en su cuenta de Instagram luciendo un aspecto muy desmejorado sorprendió a muchos internautas y admiradores del cantautor español.

Su madre, la mexicana, Lourdes Ornelas, en una entrevista ofrecida al diario español La Razón, confirmó el agravamiento de su hijo.

“Es una situación muy desagradable. Mi hijo es adicto al alcohol desde hace años. Es muy duro verle así. Tiene periodos de tiempo en los que no bebe, pero cuando menos lo esperas cae de nuevo. Si yo sigo en España es por él, para ayudarle, porque se encuentra muy solo”.

Lourdes Ornelas

Su progenitora lamentó la enfermedad que padece Camilín, manifestando que su hijo debe ser consiente del daño que se hace así mismo.

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El video

En el video se ve muy delgado y desmejorado, evidenciando que está bajo influencias del alcohol y quizás otras sustancias.

Durante el video hace referencia a su papá al decir: “mi padre ya no está, pero como su hijo, solo quiero dar gracias en su nombre. Si le faltó algo a él… perdónenme, suceden emociones dentro de mí que no son fáciles de digerir, he pasado por mucho”.

Posteriormente se dirige a su novia, quien presumiblemente le requirió por su estado, y con un tono agresivo y ofensivo le pidió que lo dejara en paz.

“No me quites mi móvil o te quito la mano de un sopetón. Soy un macho”, advirtió y prosiguió hablando repentinamente en inglés.

Aparentemente el hijo de Sesto ha estado enfrentando demonios de drogas y alcohol desde hace un tiempo, pero desde que su padre murió el pasado 8 de septiembre del 2019, se ha agravado su situación.

Por su parte, Lourdes Ornelas dijo en la entrevista antes mencionada que estando en España se siente atada de pies y manos para ayudar a su hijo, pues ella se siente sola allí, sin familiares o personas de confianza en quienes apoyarse.