En un reciente vídeo que publicó, caminó por un puente a desnivel en Tegucigalpa, capital de Honduras, y después de ponerse de espaldas para hacer un twerking, se bajó su buso dejando al descubierto sus glúteos.

La joven asegura tener 20 años, aunque muchos la ven como una niña. En las críticas más comunes están algunas donde internautas imaginan lo "orgulloso que debe estar el padre de la hondureña" que se hace llamar en redes ´Ángeles Ávilez'.

Sin embargo, Ávilez hace caso omiso a los comentarios negativos y ha dejado claro que ella es una "adulta independiente que hace lo que quiera" y que además "no vivimos en un cuento mariposita" para esperar que sus acciones sean distintas.

"La princesa de papá", "Tenía que ser de Honduras, otra más dando verguenza", "¿Será que solo así se pueden hacer virales?", "¿Por qué no se respeta?", "Lo que tienen que hacer por un simple me gusta", critican internautas.

La mayoría de vídeos que ha publicado la catracha son pasados de tono, sin miedo a que su cuenta sea censurada a causa de las políticas de TikTok, algo que algunos internautas consideran es cuestión de tiempo para que la bloqueen.

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