Alrededor de 600 barrios y colonias de Tegucigalpa y Comayagüela están bajo alerta ante la temporada de lluvias que ha comenzado a intensificarse en el país.
La ubicación geográfica de muchas de estas comunidades las convierte en puntos críticos propensos a deslizamientos y derrumbes.
Temas Relacionados
Las lluvias constantes no solo han elevado el nivel de preocupación, sino que también han incrementado el peligro para cientos de familias que residen en zonas de alto riesgo.
La amenaza de deslaves mantiene a la población en vigilancia permanente, temiendo que la inestabilidad del terreno cause tragedias.
El Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager) ha señalado que existen al menos 21 sectores identificados como altamente vulnerables. Estos puntos se localizan en diversas zonas de la capital, incluyendo el oriente, centro, norte y sur, donde ya se han registrado movimientos de tierra significativos.
Barrios de Tegucigalpa y Comayagüela en riesgo por lluvias
Vivir en zonas de riesgo se ha convertido en una prueba diaria de resistencia emocional. Cada sonido en la madrugada, cada leve vibración del suelo, activa un instinto de supervivencia que no da tregua.
La sensación de que el suelo puede desaparecer en cualquier momento transforma el hogar en un lugar de constante alerta.
La incertidumbre se mezcla con la fe, ya que muchos aseguran que solo les queda encomendarse a Dios, miles de familias viven con el miedo constante de que la tierra ceda en cualquier momento bajo sus hogares.
COPECO ha elevado a alerta amarilla a siete departamentos y a los municipios cercanos al río Ulúa, debido al incremento de lluvias. Además, seis departamentos más continúan bajo alerta verde por condiciones inestables.
Las autoridades prevén que las precipitaciones seguirán con intensidad en los próximos días, la acumulación de agua puede agravar los deslizamientos en zonas urbanas y rurales vulnerables.