La expareja formada por William Levy y Elizabeth Gutiérrez vuelve al centro de la conversación pública tras revelarse una nueva controversia legal que involucra su patrimonio.
Esta vez, ambos actores enfrentan una demanda relacionada con el incumplimiento del pago de la hipoteca de la mansión que compartieron durante años en Broward, Florida, una propiedad ligada tanto a su vida familiar como a su imagen pública.
Millonara demanda para William Levy y Elizabeth Gutiérrez
Según información difundida por los programas Lo Sé Todo y Ventaneando, la deuda asciende a una cifra cercana a los dos millones de dólares.
Los espacios televisivos señalaron que tuvieron acceso a documentos judiciales ingresados a la Corte por la aseguradora Metropolitan Tower Life Insurance Company, entidad que reclama el monto vencido tras varios meses sin recibir el pago correspondiente.
De acuerdo con lo expuesto en la emisión, la deuda se arrastra desde marzo del presente año, aunque la situación se habría agravado por el incumplimiento de un acuerdo previo de pago.
La financiera busca recuperar el saldo pendiente y no descarta avanzar hacia un posible embargo de la propiedad si no se llega a una solución. “Los demandados han incumplido sus obligaciones contractuales, y la compañía busca la recuperación total del monto adeudado”, se informó durante el programa, mientras que los actores sostendrían que la cifra reclamada no se ajusta a la realidad.
La residencia en disputa tiene un fuerte valor emocional, ya que en ella crecieron Christopher y Kailey, hijos de la expareja.
Tras la separación, Elizabeth Gutiérrez continuó viviendo en el inmueble, el cual lleva varios meses en el mercado sin lograr concretar una venta que alivie la presión financiera que enfrentan.
De acuerdo con la ficha técnica difundida por portales especializados en bienes raíces, la mansión cuenta con una extensión de 8,088 pies cuadrados, distribuidos en seis recámaras y siete baños.
El terreno, de 2.35 acres, ofrece terraza, amplias áreas verdes, piscina con spa, cancha de tenis y otras amenidades.
Inicialmente, se ofreció por nueve millones de dólares, pero la falta de compradores los obligó a reconsiderar su precio.
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