Rafael Ithier Natal, fundador y director de El Gran Combo de Puerto Rico, murió a los 99 años dejando un legado que marcó para siempre la historia de la salsa.
Víctor Rivera, abogado de la familia, confirmó el deceso este sábado a la emisora WKAQ y de inmediato artistas como Víctor Manuelle y Richie Ray expresaron su admiración y tristeza por la partida del maestro.
u salida de escena marca el cierre de una era para la orquesta que formó en 1962 y también deja un vacío profundo en la cultura puertorriqueña.
Rafael Ithier biografía: familia, edad y trayectoria
Rafael Ithier nació el 29 de agosto de 1926 en el Viejo San Juan y creció en Monacillos, Río Piedras, en un hogar lleno de música gracias a la influencia de su padre bohemio y de su tío Salvador.
Esa mezcla lo llevó a descubrir su vocación desde pequeño, cuando comenzó a tocar guitarra a los diez años antes de decidirse por el piano, instrumento que aprendió de manera autodidacta.
En 1941 inició su carrera profesional con el Conjunto Hawaiano de Fermín Machuca y años después, en 1952, ingresó al Ejército estadounidense y vivió la guerra de Corea.
Tras licenciarse en 1954 celebró junto a su amigo Rafael Cortijo y se integró al famoso Combo de Cortijo, experiencia que se convirtió en su verdadera escuela musical.
En 1962 decidió dar un giro y fundó El Gran Combo junto a Rogelio Vélez, Martín Quiñones, Miguel Cruz, Eddie Pérez, Héctor Santos y Roberto Roena, a quienes se sumaron Milton Correa, Daniel Vázquez, Micky Duchesne, Chiqui Rivera, Pellín Rodríguez y Andy Montañez. Ese mismo año realizaron su primer bailable y grabaron “Menéame los mangos”, que marcó el inicio de una trayectoria que pronto se separó del estilo de Cortijo y abrió un camino propio.
La orquesta se convirtió en pionera en televisión en vivo y en una de las pocas agrupaciones puertorriqueñas capaces de presentarse en los cinco continentes, sueño que Ithier cumplió en 2016 al llegar a África.
El maestro enfrentó desilusiones, como la salida de figuras clave, pero siempre encontró la manera de renovar el grupo gracias a su oído y a su criterio para sumar talento.
En 2006 cedió el piano a Willie Sotelo y más adelante parte de la dirección, aunque siguió al frente del concepto que convirtió en bandera musical. Con más de 70 discos y una influencia imposible de medir, Rafael Ithier deja una biografía marcada por disciplina, constancia y una pasión que cambió la salsa para siempre.
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